
La Jazanut es una disciplina y como tal no se encuentra exenta de estos interrogantes.
Ahora bien, nadie dudaría, que debe existir una escuela para arquitectos, abogados, químicos. Nadie permitiría en su sano juicio ser operado por un cirujano que no haya ido a la universidad. Y yendo al terreno de lo religiosos, ninguna comunidad judía tomaría a un rabino cuyo saber no se encuentre abalado por alguna institución reconocida. Sin embargo, he asistido a más de diez discusiones (y estoy seguro que mientras usted esta leyendo este artículo se están generando muchas más a lo largo del mundo) ya sea presenciales o a través de la web, al respecto de si la jazanut es una disciplina que debe ser estudiada en una escuela o alcanza con la vocación, la intuición o las enseñanzas recibidas de otros anteriores en la profesión a uno. De hecho, existen muchísimos jazanim que se encuentran en funciones en prestigiosas comunidades judías, que no han asistido nunca a una escuela de jazanim y muchos de ellos son considerados los mejores de la profesión. ¿Por qué se da al caso? Tengo una teoría al respecto.
Las profesiones que hoy requieren por consenso internacional titulo habilitante, poseen las siguientes cualidades: 1) Son muy antiguas, 2) Tienen en general muy definidos sus campos de acción
Usted podría argumentar que la jazanut es una disciplina también muy antigua con sus orígenes en la época del Segundo Gran Templo de Jerusalem y que figura en las fuentes judías como ser el Shulja Aruj y La Mishna. En este punto yo le diría que si bien esto es cierto, el jazan como profesional de tiempo completo solo comienza a ser una realidad a partir de mediados del siglo XIX, con el auge de las composiciones litúrgicas. Anteriormente y según las fuentes más antiguas el jazan debía tener las siguientes cualidades: Poseer una apariencia agradable, estar casado, y tener una barba, incluso Maimonides decidió que el jazan que recitaba las oraciones en shabat y los días laborables no necesitaba tener una apariencia agradable a todo el mundo, incluso podría tener una reputación no del todo impecable, siempre que mantuviera una vida moralmente libre de reproche en el momento de su nombramiento. Estas cualidades son fáciles de poseer, de hecho durante la edad media en general, cualquier judío mayo de 18 años las poseía, aunque mayormente eran elegidos los de mejor voz. Cuando surgieron las nuevas composiciones litúrgicas y los instrumentos musicales en la sinagoga el jazan, ya no podía ser cualquiera, tenía que tener la preparación vocal y musical para poder interpretarlas y es aquí, cuando comienza por primera vez a entenderse a la jazanut como una profesión. Por lo tanto, la verdad es que la jazanut entendida como profesión es verdaderamente muy nueva.
Aunque el correr del tiempo haya modificado un poco el campo de acción sabemos que un medico es un profesional que se encarga de la manutención de la salud, un arquitecto construye estructuras para viviendas y actividades comerciales, un maestro de escuela primaria enseña a leer y a realizar las operaciones matemáticas básicas, un rabino es un líder espiritual y un juez. Sin embargo la jazanut constantemente incrementa sus funciones y es verdaderamente difícil hoy en día definir qué es o a qué se dedica un Jazan. Los Cambios económicos, políticos y sociales han generado que el jazan ya no solo sea un experimentado músico y conocedor de la liturgia. También un jazan es un lector de Tora, un maestro de Iaadut (judaísmo), un líder espiritual, un director de coro, un administrativo, un representante de la comunidad judía hacia el mundo gentil y por qué no y antes que nada, un miembro de su comunidad con todo lo que ello implica.
La novedad de la jazanut como disciplina profesional y la dificultad para delimitar sus funciones seguirá dando tema para hablar y discutir.
A modo de ejemplo quisiera decir que al principio los médicos, aprendían solo de sus antecesores y con el tiempo se entendió la importancia de un estudio sistemático y académico al respecto. Estoy persuadido que lo mismo ocurrirá con la jazanut. El tiempo irá demostrando cada vez más la importancia de la necesidad de la preparación académica del jazán a raíz de las nuevas necesidades que el futuro depara a esta incipiente disciplina.

